“El arte teatral se produce cuando se logra armonizar la trilogía formada por el autor, actores y el público. Sin embargo, yo diría que es mucho más que eso, para que esta trilogía funcione bien, debe existir todo un entorno que construya una base, un soporte, que haga posible llegar al momento mágico de “abrir el telón”.
Es evidente que parte importante de este entorno es la escenografía, la iluminación, la utilería, el mobiliario, todo el apoyo técnico de una producción teatral”
Es evidente que parte importante de este entorno es la escenografía, la iluminación, la utilería, el mobiliario, todo el apoyo técnico de una producción teatral”
Un espectáculo teatral no sólo necesita de los actores, también necesita verse y verse bien y para eso están los técnicos, el equipo que trabaja detrás del telón. Son las personas encargadas de crear, diseñar, otros de operar, manipular o manejar los equipos o aparatos. En sí son creadores llamados a darle el estilo, la estética, son los encargados de investigar, indagar, conseguir y plantear sus ideas como artistas al director y en conjunto decidir lo que el público verá, lo que será la puesta en escena. Muchas veces este equipo que no son protagonistas en la historia, es el que le da cuerpo a la obra, al espacio, al tiempo, al clima e incluso le da el carácter externo a los actores.
Un montaje teatral es el trabajo de un equipo conformado por el director, el escenográfo, el diseñador de vestuario, el maquillador, los iluminadores, los encargados de la creación o selección musical, como también los que operan el sonido, la consola de luces y con los tramoyas que sacan o entran elementos, bajan o suben los telones.
Pensando que éste es un trabajo que muy pocas veces ocupa algún artículo en la prensa, para referirnos a los tantos y tantos aprendices, técnicos y asistentes que han colaborado en dar forma a las obras del Teatro del Norte, en este capítulo se recurre a quien ha trabajado directamente con ellos en estos 25 años de historia, al director, Guillermo Jorquera Morales para que nos cuente su experiencia con “Los hijos de las flores” y con “Los gatos”. Esos amantes del teatro que estuvieron en las bambalinas del tiun y del tenor por mucho tiempo.
Nos referiremos a ellos en forma especial porque fueron dos grupos identificables, sin olvidarnos de las muchas individualidades en este mismo campo, quienes también fueron tan creativos, permanentes y útiles en las múltiples puestas en escena, como fue el trabajo que realizó Félix Manzo en el área del sonido y de la selección musical desde el año 1984 hasta 1992, Esmilda de Vega como modista desde los inicios del Tiun, Guillermo Ward como maquillador y diseñador de vestuario desde “Cuento de Verano” hasta “Lautaro”, Sonia Sepúlveda como asistente de escenario hasta los últimos días del TENOR, los fotógrafos José González Enei, Carlos Carpio, Ricardo y Paco Herrera, Carlos González, quienes registraron gran cantidad de las imágenes que hoy nos hacen rememoran el pasado, sin olvidarnos de la Imprenta Zavala que por años diseñó e imprimió los folletos, programas y trípticos de la mayoría de las obras.
Un montaje teatral es el trabajo de un equipo conformado por el director, el escenográfo, el diseñador de vestuario, el maquillador, los iluminadores, los encargados de la creación o selección musical, como también los que operan el sonido, la consola de luces y con los tramoyas que sacan o entran elementos, bajan o suben los telones.
Pensando que éste es un trabajo que muy pocas veces ocupa algún artículo en la prensa, para referirnos a los tantos y tantos aprendices, técnicos y asistentes que han colaborado en dar forma a las obras del Teatro del Norte, en este capítulo se recurre a quien ha trabajado directamente con ellos en estos 25 años de historia, al director, Guillermo Jorquera Morales para que nos cuente su experiencia con “Los hijos de las flores” y con “Los gatos”. Esos amantes del teatro que estuvieron en las bambalinas del tiun y del tenor por mucho tiempo.
Nos referiremos a ellos en forma especial porque fueron dos grupos identificables, sin olvidarnos de las muchas individualidades en este mismo campo, quienes también fueron tan creativos, permanentes y útiles en las múltiples puestas en escena, como fue el trabajo que realizó Félix Manzo en el área del sonido y de la selección musical desde el año 1984 hasta 1992, Esmilda de Vega como modista desde los inicios del Tiun, Guillermo Ward como maquillador y diseñador de vestuario desde “Cuento de Verano” hasta “Lautaro”, Sonia Sepúlveda como asistente de escenario hasta los últimos días del TENOR, los fotógrafos José González Enei, Carlos Carpio, Ricardo y Paco Herrera, Carlos González, quienes registraron gran cantidad de las imágenes que hoy nos hacen rememoran el pasado, sin olvidarnos de la Imprenta Zavala que por años diseñó e imprimió los folletos, programas y trípticos de la mayoría de las obras.
Haciendo click sobre esta dirección encontrará detalladamente el Listado de equipos técnicos 1974-1998 que tuvieron participación en los diversos montajes durante los 25 años del Teatro del Norte,TIUN-TENOR.